Es una pregunta muy común entre los que se inician la de ¿por qué me tengo que poner gafas? o incluso ¿no me valen las Ray-Ban que tengo?. Y aunque las razones nos puedan parecer muy obvias a los que llevamos muchos años sobre las dos ruedas no está de más recordarlas.
¿Me valen las Ray-Ban típicas de cristal?
¡No! Nunca deberías llevar puestas unas gafas con piezas metálicas o de cristal. Ten en cuenta que ante una caída, por leve que sea, unas gafas de sol estándar podrían clavársenos en la piel o lo que es aún peor: en los ojos, causando lesiones irreparables en muchos casos. Jamás utilices en bici gafas que no estén pensadas para la práctica del ciclismo.
He comprado unas gafas deportivas genéricas en Decathlon…
Este es otro de los grandes errores. Existen gafas de sol que pueden valer para caminar por la montaña pero que en realidad no están diseñadas para la bici. Muchas de ellas son plásticas y fabricadas en una sola pieza. Eso hace de ellas también un riesgo para nuestra integridad si tenemos un accidente. Las gafas de ciclismo están pensadas para «desmontarse en piezas» si nos caemos. Esto no es algo malo, todo lo contrario. De hecho es habitual que tras una caída veamos las gafas desmontadas pero sean aún utilizables, pero lo vital es que no nos causarán ningún tipo de lesión.
¿Por qué hay que llevar gafas de ciclismo?
Una vez que te hemos convencido de que unas gafas «genéricas» no valen para montar en bici, aún mucha gente se resiste a utilizarlas por varias razones:
- «Es que las gafas no me quedan bien»
- «Se me mueven»
- «Las gafas se me empañan»
- «Voy más fresco sin ellas»
Si te fijas la justificación a no llevarla se parece mucho a la que hacían los ciclistas de la vieja escuela a llevar casco y hoy día a nadie en su sano juicio se le ocurriría ir en bici sin él. Pues con las gafas, salvando las distancias, es lo mismo: nuestra seguridad depende de ellas en gran medida.
Debes saber que no son un complemento estético para ir más o menos guapo, lo importante es que nos protejan. Si se mueven es o porque no son de tu talla o simplemente porque no las has puesto bien. Si se te empañan las gafas aquí tienes un consejo de andar por casa pero que funciona muy bien.
Vamos a ver una serie de razones para llevar gafas de ciclismo:
- Te protegen ante la entrada de insectos, piedras o ramas. Si alguna vez te ha pasado sabrás del momento de inquietud que se vive. Más aún si vas a mucha velocidad. Tu cuerpo se centrará en el ojo y podrías perder el control de la bici.
- El contacto con el aire de los ojos a gran velocidad por largos periodos no es lo mejor para ellos.
- Te protegerán del primer impacto en caso de caída para luego desmontarse y no hacerte daño.
Y además te diremos, ya en tono jocoso, que parecerás un globero si no llevas gafas. Así que no hagas el ridículo con la grupeta y protégete.